1Pensá en lo que la gente puede ver o escuchar
Esto hace referencia a todos los servicios de videoconferencia, no solamente a Zoom. Antes de iniciar una llamada, pensá lo que la gente va a ver o escuchar cuando te unas. Incluso aunque estés solo en casa, tené en cuenta la imagen y el audio que vas a transmitir.
Lo mismo pasa con tu pantalla, si es que tenés pensado compartirla. Cerrá todas las ventanas que no te gustaría que otros vieran, así sea un regalo sorpresa que estás comprando online para alguien de la llamada en Zoom, o una búsqueda de trabajo de la que tu jefe no tiene por qué enterarse. Puede haber muchos ejemplos más picantes, así que cerrá esas pestañas antes de arrancar. Y ahora sí, armá esa reunión virtual que estabas planeando.